Hoy ha tenido lugar el acto de entrega de premios de la II edición de relatos cortos en honor a Pablo Aranda. Por segundo año consecutivo, nuestro colegio ha organizado un concurso con el fin de fomentar la escritura entre el alumnado y la capacidad de entender esta como herramienta de crítica, evasión, ayuda y comunicación. En este concurso estaban invitados a participar centros de toda Málaga. Por ello, para la difusión de las bases contamos con la colaboración del Ayuntamiento de Málaga.

El acto se ha iniciado con música en directo. No podía ser de otra manera, ya lo decía Don Bosco: «un colegio sin música es como un cuerpo sin alma». Sin embargo, el verdadero centro y sentido de este concurso es Pablo Aranda. Fue profesor de nuestro centro y, además, también participó en diversas actividades con los más jóvenes de la Casa en su faceta como escritor. Él fue, y sigue siendo, fuente de inspiración y ejemplo por su constancia y su sonrisa perenne. Independientemente de las circunstancias. Desde nuestro centro consideramos que sus valores son básicos en nuestro sistema educativo y por eso queremos seguir haciéndolo presente en este tipo de actos.

La RAE define escritura en su tercera acepción como «Arte de escribir». Así es, mucho más que una actividad, es todo un reto. Los participantes han sido capaz de dejar atrás la vergüenza y dejarse la piel delante de unos cuantos folios que esperan impaciente ser escritos, convertirse en protagonistas de historias de lo más variopintas. Quienes somos amantes de la literatura sabemos que realmente un libro, un relato o incluso unas líneas pueden convertirse en el billete de avión del viaje de nuestros sueños, nuestro compañero en momentos de adversidad y nuestra calma cuando fuera solo se escucha la tormenta. Ya lo decía Emily Dickinson «Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro». Sus relatos nos han llevado a lugares lejanos. Nos hemos metido en la piel de sus protagonistas.

Entre los ganadores se encuentran diversos colegios como Maristas, Gamarra, Novaschool y nuestro centro. Desde aquí trasladamos nuestra más sincera enhorabuena a todos los participantes. Sin ellos esto no habría sido posible.

Hoy hemos vuelto a rendir homenaje a Pablo Aranda en esta Casa que, sin duda, sigue siendo la suya.